En el laboratorio

En la clínica dental, después de proceder al aclarado, colocamos la impresión en una bolsa, no la debemos envolver con una toalla húmeda. La humedad residual se encarga de conservar la impresión.

Una vez rellenada la ficha de identificación, podemos sumergir la impresión en una solución de predesinfección durante unos 3 minutos. Un chorro de aire permitirá eliminar el exceso de agua.
La impresión ya está lista para proceder al colado. Le aconsejamos que utilice yeso Fuji Rock de la sociedad GC, de acuerdo con las recomendaciones del fabricante.
Primeramente el operario colará el yeso en la preparación y después del fraguado reservará su segundo colado para el antagonista.

El producto cuenta con una débil deformación permanente, 0,12% en 24 horas y 0,3% en 48 horas, hecho que ofrece suficiente plazo para su tratamiento en laboratorio.
El desmoldeo es fácil y la integridad del modelo de yeso está garantizada.
En cuanto a las prótesis fijas, en las impresiones realizadas con hidrocoloide Classe Apol se utilizan los mismos procedimientos técnicos que en las impresiones de silicona

El uso de Classe Apol para una impresión de tipo Bite tray aporta una gran precisión en cuanto a la oclusión.
La perfecta compatibilidad entre Classe Apol y el yeso se traduce en una fuerza de atracción potente, al contrario que en el caso de la silicona, en la que detectamos una fuerza de repulsión. La formulación del hidrocoloide es por naturaleza hidrófila. Sumado a la precisión del material obtenemos un modelo exacto y un estado de superficie óptimo.
En este caso, la preparación se modeliza mediante ordenador. En la pantalla podemos ver la representación de la futura corona de circonia. Ya se puede integrar la corona definitiva en boca.